Sh'ma Israel

El Especialista, película de Eyal Sivan, producida por la Mossad y con la brillante actuación de Adolf Eichmann, el artista de Wannsee, virtuoso de la deportación y pintor de la escena Dantesca del cócito Europeo.

¿Quién mejor que un nazi consagrado para mostrarnos el anestesico que la maldad perpetuada en gran escala y en cadena es inducido a personas realmente mediocres y carentes de sentido de humanidad y compasión?.

Eichmann en el banquillo, la última cara del dado Hitler, Himmler, Heydrich, Mengele y Hoss, por recordar los mas carismáticos. El fiscal duro que recrimina, acusa, humilla, expone y azota con el látigo de la ley, que pide el castigo simbólico del largo sufrimiento de su adorado pueblo, Sh'ma Israel!.

Este documental expone de manera clara y bien intencionada 3 partes: la mala, la buena y la justa. Eichmann, de edad ya avanzada, con sus lentes, su clásica mueca en los labios, una mueca que recuerda a un niño que rompe un vidrio con su pelota, siendo recriminado por el vecino.
¿Que pensaba el hombre?, está desnudo frente a sus odiados yids, a los que años atrás pisoteaba y condenada a muerte con sus firmas y decretos, está siendo acusado, las pruebas reclaman su penitencia y calvario, el desfile de víctimas y testigos parece interminable, pero el sigue, sentado, levantándose para acercarse al micrófono cada vez que habla, su cara.. continúa con su mueca... Así es Eichmann, el carnicero de Europa condecorado por su extinto Reich, alabado por sus subordinados, elogiado por Himmler, el otrora SS-Obersgruppenführer ahora difultosamente se trata de explicar echando ojo a las montañas de documentos que tiene en sus manos que intentarán explicar que lo que hizo fue, porque era un siervo de Alemania.
No hay mucho que decir en cuando a las formalidades del film, que nos condensa lo eterno del juicio, los protocolos sobran, solo queremos a Eichmann diciendo cosas que lo hagan parecer idiota y que el fiscal nos parezca una especie de Caifás autorizado.

Al tiempo que Eichmann parece estar saliendo de sí mismo para intentar parecer una víctima de la intifada, uno de los jueces rompe con la rutina temática y sentimental del juicio, expone a Eichmann verdaderamente a su propia consciencia.

En lo personal este documental me parece extraordinario, totalmente sincero en tanto a que retrata un juicio ya legal, ya vengativo... no importa como sea la diegética, me parece que habla con franqueza mostrando la imagen del mal frente a su propio mal, ese mal que se confronta inevitablemente a los demonios.